El merengue es una mezcla ligera y no grasosa de claras de huevo y azúcar, que se usa para cubrir pasteles o hacer bocados pequeños e individuales. Para obtener una textura espesa y brillante, deberás concentrarte en los detalles: la calidad de los huevos, el tiempo que pasas batiendo las claras y la temperatura del horno.
Pasos
Parte 1 de 3: haz un merengue espeso y brillante

Paso 1. Separe los huevos
Usando los huevos más frescos posibles, separe con cuidado las claras de las yemas en un recipiente limpio y seco. Romper la cáscara, separar las dos mitades y verter la yema suavemente de cáscara a cáscara mientras la clara se escurre en el bol. Repita con todos los huevos necesarios para su receta (generalmente 2 o 3 para una cobertura de pastel).
- Reserva las yemas para usarlas en helado o crema.
- Si no desea utilizar la técnica de separar las claras y las yemas con la cáscara, puede utilizar un método diferente.

Paso 2. Deje reposar las claras a temperatura ambiente durante unos 30 minutos
La temperatura de los huevos afecta en gran medida la textura del merengue terminado, por lo que es importante dejarlos reposar a temperatura ambiente. Asegúrese de que el recipiente no esté cerca del horno ni una fuente de frío.

Paso 3. Batir los huevos con el crémor tártaro
Esta sustancia aglutinante ayuda a los huevos a formar picos gruesos y brillantes. La mayoría de las recetas requieren aproximadamente ½ cucharadita de crémor tártaro para 2 claras de huevo. Batir las claras de huevo y el crémor tártaro con un batidor eléctrico hasta que la mezcla esté blanca y esponjosa y forme picos suaves.

Paso 4. Agrega el azúcar y sigue batiendo
El azúcar se debe agregar lentamente con una mano, mientras continúas batiendo el merengue con la otra mano y la batidora eléctrica. Por lo general, necesitará ¼ de taza de azúcar para 2 claras de huevo. Sigue batiendo hasta que se formen picos rígidos en la mezcla. Luego, la mezcla debe adquirir un brillo satinado, cuando hayas agregado todo el azúcar.

Paso 5. Pruebe los picos
Saca el batidor del cuenco de merengue. Cuando le quites los batidores, se deben formar picos gruesos, firmes y brillantes que permanecen en su lugar. Cuando incline el recipiente, la mezcla debe mantener su forma y no deslizarse hacia un lado. El merengue está listo para usarse en una receta.
Parte 2 de 3: saber qué errores evitar

Paso 1. Asegúrese de que la mezcla esté a temperatura ambiente antes de batirla
Si hace demasiado calor o demasiado frío, no podrá obtener esos picos firmes y brillantes que necesita para un hermoso merengue.

Paso 2. Evite mezclar yemas de huevo o trozos de cáscara con claras de huevo
Una pequeña gota de amarillo evitará que consigas el volumen deseado. El amarillo intenso cambia la composición de la mezcla, al igual que las astillas de cáscara.
- Si dejó caer la yema o la cáscara en su merengue, sería mejor comenzar de nuevo desde el principio en lugar de intentar recoger los trozos.
- Puede evitar las claras de huevo rompiendo los huevos en un recipiente diferente al que se usó para mezclar el merengue y luego transfiriendo las claras suavemente al recipiente.

Paso 3. Evite poner agua en el recipiente
Asegúrate de que el recipiente en el que preparas tu merengue esté completamente limpio y seco. Durante el proceso de preparación, evita poner la más mínima gota de agua en el bol, ya que cambiará la composición del merengue y estropeará tu preparación.

Paso 4. No vierta todo el azúcar de una vez
Para obtener picos firmes y brillantes, deberá agregar el azúcar lentamente, para darle tiempo para que se incorpore de manera uniforme.
Parte 3 de 3: Usar merengue en una receta

Paso 1. Use el merengue como aderezo para un pastel
Esta popular forma de usar el merengue requiere un poco menos de delicadeza que hacer bocados de merengue, ya que al hornear la tarta en el horno, las puntas de merengue saldrán bonitas a pesar de que al principio estaban bastante blandas. Cuando el relleno de la tarta esté listo, simplemente esparce el merengue encima, luego colócalo en el horno y hornea hasta que la parte superior del merengue esté ligeramente caramelizada.
- Puede hacer que su pastel sea aún más hermoso haciendo mini consejos. Después de esparcir el merengue en la superficie del pastel, use el dorso de una cuchara para levantar suavemente la superficie del merengue en pequeños picos. Repite este patrón en todo el pastel.
- Asegúrese de que su horno no esté demasiado caliente cuando hornee un pastel de merengue. Para que las puntas se mantengan en su lugar, la humedad debe evaporarse poco a poco a una temperatura bastante baja.

Paso 2. Hacer bocados de merengue
Para hacer esto, asegúrese de haber batido el merengue el tiempo suficiente para formar puntas gruesas, firmes y brillantes. Coloque cucharadas de merengue en una bandeja para hornear. Use el dorso de una cuchara para presionar ligeramente el centro del merengue, luego levántelo para formar un pequeño pico. Repita con todos los merengues restantes y hornee durante unos 10 minutos o hasta que estén dorados.
- Puede darle sabor a su merengue mezclando canela, especias, chispas de chocolate o cacao en polvo.
- Para obtener bocados más agradables de merengue, llene una manga pastelera con su preparación y presione sus merengues en una bandeja para hornear galletas, a través de una boquilla decorativa. Esto le permitirá formar remolinos nítidos y otros patrones.
- Para hacer merengues de menta, mezcle unas gotas de extracto de menta y colorante rojo en un bol. Después de colocar los merengues en su lugar en la bandeja para hornear galletas, use un pincel limpio para pintar rayas alrededor de sus merengues, antes de hornearlos.